Realización económica

El sentirse uno realizado, en cualquiera de los roles y aspectos de la vida, es relativizado por la complejidad sistémica de cada quien.

Los conflictos con el poder económico, proceden de nuestras creencias y modelos mentales. Esto es fruto de la cultura, enseñanza, entorno. No es algo inherente a nosotros, más bien se trata de algo aprendido con mensajes subliminares, no es parte de nuestra identidad, por lo tanto se puede reaprender y cambiar.

Nuestro sistema funciona con impulsos. Estos impulsos tienen su procedencia en el inconsciente a base de repeticiones de mensajes recibidos y no replanteados. Es satisfactoria la tensión que se crea en  nosotros cuando estamos ilusionados por un proyecto: la tensión creativa. Ésta te permite avanzar y sostener la visión en tu objetivo, al tiempo que te mantiene en un estado de actividad que te lleva a la realimentación, un proceso de generatividad. La otra versión, no deseada, es la tensión que nos lleva al desequilibrio interior provocando el estrés, la ansiedad, la apatía y las dudas.